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Título original: A Court of Mist and Ruin
Título en español: Una corte de alas y ruina
Autora: Sarah J. Maas
Serie: Una corte de rosas y espinas #3
Traductor(es): Julio Sierra
Páginas: 663
Editorial: Planeta bajo el sello Cross Books
Edición leída: 2a
Feyre ha vuelto a la Corte Primavera decidida a desvelar como sea las artimañas de Tamlin y el rey que amenaza Prythian. Pero para hacerlo, tendrá que recurrir al mortal juego del engaño... y un solo paso en falso podría condenarla, no solo a ella sino a su mundo entero. La guerra se cierne sobre todos y habrá que elegir muy bien en quién confiar e incluso hallas aliados en sitios inesperados.
«UNA PESADILLA», LE HABÍA DICHO A TAMLIN. YO ERA LA PESADILLA.
Hace poco que he terminado de leer el libro y he estado pensando mucho en qué escribir porque la verdad no creo poder hacerle justicia a lo que he leído de este mundo tan impresionante. Así que haré mi mejor esfuerzo por contarles mi perspectiva del libro.
En caso de que aún no hayas leído la serie o incluso este libro, te comento que a partir del punto final de este párrafo, contendrá varios spoilers de la serie. Sooo, let's do this!
Una historia que comienza como un retelling del clásico de la Bella y la Bestia, con una primera entrega -Una corte de rosas y espinas- en donde nos presentan a una joven de tan solo 19 años que debe ser el soporte de su familia debido a un padre muy despreocupado respecto al bienestar de sus hijas, y dos hermanas mayores que para nada son de utilidad ante la crisis económica por la que han estado pasando los últimos años de sus vidas. Después de que por cosas de la vida conoce a Tamlin, alto lord de la Corte Primavera de Prythian, odiarlo y amarlo hasta el punto de sacrificarse ante la bruja -pero diosa- de Amarantha para liberar el pueblo de todos los faes, especialmente liberar a Tamlin y su pueblo de la maldición, Feyre, nuestra protagonista, ya siendo una alta fae por su sacrificio y demás, vuelve a odiar a Tamlin por la manera en que este la ha tratado. Pues sí, él llegó a enamorarse de ella que al ver todo lo que ella dio de sí para salvarlo, su ser cambió al modo «sobreprotector», y admito que también odié la manera en que Tamlin intentó proteger a Feyre. Me exasperaba.
En la segunda parte Una corte de niebla y furia, nos encontramos -en un principio- a una Feyre más sumisa, más amoldada a su alto lord de la Corte Primavera, pero también a una Feyre que está muerta en vida. Una chica que dio tanto de ella que ya no le queda más que respirar para poder caminar. Y aunque está junto a su enamorado, hay algo que no le permite estar del todo feliz. Cuando llega el tan anhelado día de su boda, ella está insegura. Duda si realmente quiere pasar toda la eternidad viviendo como ha vivido después de lo ocurrido en Bajo la Montaña, así que como por arte de magia -sí, Sulay, estamos hablando de faes-, aparece Rhysand, alto lord de la Corte Noche y reclama el acuerdo que él y Feyre hicieron durante Bajo la Montaña, y es que ella debía irse una semana de cada mes con él a su corte. Bien, en este punto seguí deseando más acción tal como se mostraba en ese pedacito de tierra de Prythian llamado Bajo la Montaña; que apareciera nuevamente Amarantha u otra santa bitch como ella lo fue, pero no... aquí la autora nos presenta la verdadera realidad de este triangulo amoroso -¿un triangulo amoroso?, ¿enserio?-, ¡sííííí! un triangulo en el que debo admitir me encantó mucho porque no se vio forzado. Y por su puesto, descubrir que tu compañero es Rhysand, obvio vas a querer vivir el libro completo. Pero toda esta historia de amor muy sano -no como los típicos triángulos amorosos-, se ve afectada cuando aparece el tan mencionado Rey de Hybern. Y es él quien nos lleva a nuestra tercera entrega de la serie.
Después de que el Rey de Hybern ha reconstruido a Jurian, anulado el vínculo de apareamiento entre Rhysand y Feyre, convertido a Nesta y Elain en faes por medio del Caldero, tratado de asesinar a Azriel y destrozado las alas de nuestro ilirio favorito, Cassian, Feyre está de regreso en la Corte Primavera, pero esta vez no es la oveja que fue durante el tiempo anterior. Ahora ella es el lobo de la historia, pues su misión, como alta lady de la Corte Noche, es mostrarle a Tamlin que se equivocó al escoger el lado de Hybern solo para rescatarla a ella, a la mujer que amó y perdió debido a su falta. Pero también de mostrarle a Prythian, que Hybern es el enemigo real al que se deben enfrentar a costa de todo y bajo cualquier precio, incluso si eso signifique que una de las Cortes, especialmente aquellas aliadas al rey, sean las que terminen como más daño. Además, ella no solo debe pensar en los faes, sino también en los humanos. Esa raza a la que ella una vez perteneció, y a la que en parte pertenece en corazón y espíritu.
Durante su estadía por la Corte Primavera, Feyre se encuentra con que debe ser anfitriona de los sobrinos del rey y de Jurian, personasjes que no les agradan mucho y por supuesto, deberá soportar la presencia de la sacerdotisa Ianthe. Lucien sin embargo, se siente algo curioso y sospecha del comportamiento de Feyre. Todo su plan -muy arriesgado, por cierto- va bien hasta que llega el día en que debe regresar a su corte junto a su compañero, junto a su familia, evidencia como Ianthe está acosando a Lucien -quienes por supuesto no se llevan bien, pero Ianthe es una verdadera b***h- así que decide ayudar un poco a su amigo, o quien alguna vez lo fue. Gracias a esto, Ianthe solo termina con una mano hecha añicos, los príncipes de Hybern muertos -venganza por haber matado a unos inocentes hijos de benditos-, con Feyre y Lucien huyendo con poco de su poder debido al veneno destructor de sangre que los príncipes colocaron en sus comida y con un ejército y gran parte de la Corte Primavera dándoles la espalda a su alto lord. No obstante, en el camino encuentran sus respectivos obstáculos: los hermanos de Lucien, entre ellos Eris, el más odiado por el grupo íntimo de la Corte Noche. Su misión: atrapar a Lucien y Feyre y llevarlos ante los lores de Otoño y Primavera para su respectivo juicio -lo que entendí como su muerte-, but, no mi ciela. No es tu día. Los dos logran escapar de estos seres llamados hijos de Beron y logran pasar la frontera a la Corte Invierno en donde creen están a salvo hasta que reaparecen los que odié mucho por querer matar a Lucien, y me alegré mucho cuando Lucien y Feyre fueron salvados por los bellos ilirios Cassian y Azriel, quienes los transportaron a la Corte Noche.
Una vez en su hogar, Feyre y Rhysand deben buscar estrategias para reunir y unir a todo Prythian para enfrentarse ante Hybern y así poder tener más tiempo de paz en el mundo. Pero esto no será posible sin la ayuda de todos, especialmente de Nesta por lo que sea que le haya robado al Caldero. Así que sí, en este libro la odiosa de Nesta tiene mucho más protagonismo.
A pesar de todos los esfuerzos de la Corte Noche, principalmente de Rhysand, nuestro gran equipo encargado de salvar a Prythian y al reino humano, se entera de que el rey de Hybern ha atacado, lo que significa que ha empezado la guerra, y lo hizo mucho antes de lo que se pensaba, de lo que estaba planeado según la información recolectada por sus espías. Ya en la medio de la guerra, vemos como poco a poco van cayendo los guerreros de ambos lados, tenemos incluso alianzas inesperadas y verdades reveladas.
Fin de los posible spoilers.
Ahora bien, este libro siento que lo leí mucho más rápido que los dos primeros - y es el más gordito, ¡eh!-. y puedo decir que me ha encantado. Ciertamente una gran parte del libro se vuelve lenta ya que te habla de las estrategias que se están creando para enfrentar la guerra que está a la vuelta de la esquina, pero al dejarte intrigada la segunda parte, sientes que necesitas más información y contribuyendo a que la lectura de esta tercera entrega sea mucho más rápida. Suma si eres como yo y te llama más la acción de la historia que el romance. Y repito, aunque vemos romance en esta historia, no se siente como el eje central de todo.
Todavía sigo encantada con el círculo íntimo de la Corte Noche: Azriel, Amren, Mor, Cassian y Rhys, ellos son genuinamente encantadores, ¡los amo! Sus personalidades son lo máximo. Pueden ser divertidos y concentrarse en sus trabajos sin ningún impedimento. Feyre, aunque tuvo una gran evolución en el segundo libro y al principio de este, muchas veces no llegué a tenerle la paciencia suficiente, pues sigo pensando que a veces actuada de una manera estúpida, pero bueno... reconozco que todavía es joven para el mundo de faes con más años de vida que ella. El protagonismo de Nesta en el libro, aunque interesante, fue muy frustante. Quise tirar el libro cada vez que aparecía en la historia. Y es que Nesta es un personaje demasiado orgulloso y odioso. Es tan fiel a sus creencias que al parecer para ella todo lo que dice debe ser la ley general. No es para menos que se tenga una resistencia al cambio cuando el cambio llega de golpe como le pasó a ella y a Elain; sin embargo, Nesta se pasa con su odio al mundo entero, y más por la manera en que aborrece a Cassian, quien solo quiere ayudarla independientemente de lo que haya deseado la Madre que pasara entre ellos.
Y ni hablar de la faceta de Azriel aquí. Cada vez que se acerca a Elain *posible spoiler* quisiera que el lazo de apareamiento fuera entre ellos y no hubiesen mezclado aquí a mi amado Lucien *fin del posible spoiler* Ambos son tan hermosos juntos que me hacen olvidar que Azriel en realidad está enamorado de Morrigan. ¡Y Madre santísima!, enterarme del secreto de Mor fue *inserten boca abierta por el shock. Realmente me esperaba cualquier cosa de Morrigan, menos ese secreto. ¡De verdad ni lo imaginé! Todo este tiempo estuve tan inocente de que su don, aunque sea la verdad, ella vivía escondida por temor. Solo deseé que pudiera ser libre de ella misma. T.T
A pesar de que el libro no fue lo que esperaba - porque esperaba más-, logró emocionarme mucho. Definitivamente el mundo creado por Maas tiene lo suyo. Tiene su encanto -y no solo por Rhys, porque en realidad mi amor lo comparto entre Azriel y Lucien-. El hecho de que ella no se enfoque de lleno en el romance, es lo mejor por el simple hecho de que no se siente como una historia superficial. Además, nuevamente se la ha rifado con los detalles de las situaciones y lugares en que se encuentran nuestros personajes. La manera de describir que tiene la autora es fantástica, porque te ayuda a ir imaginando el posible escenario en el que se encuentran nuestros personajes -incluso las parte entre Rhys y Feyre son muy bien descritas.
Ahora, lo que más se me hace curioso de toda la historia y que como muchos -supongo- quedamos, la manera en que Feyre descubre que Lucien es en realidad hijo de otro alto lord. ¡Por la Madre que quedé impactada! Me ayudó a comprender muchas cosas relacionados a este personaje, y queriendo un libro solo con su historia -aunque sé que eso no es posible.
La coherencia de la historia hace que quiera leer las otras series de la autora, porque con esta demuestra la realidad de cualquier mundo, y es que nunca hay un final feliz para todos. Debes trabajar por lo que quieres y a cambio esperar todo y nada.
En resumen, esta historia tiene de todo y te hará sentir que quieres más. Así que sí, la recomiendo a montón, porque todo el hype que tiene esta serie y ves en las comunidades lectores es cierta. Por lo menos te podrá ayudar a reencontrarte con la lectura, sea por un bloqueo lector o por el género.
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